De la misma forma que nosotros nos preparamos para nuestras vacaciones, lo mismo tenemos que hacer con nuestras mascotas, porque vamos a convivir en ambientes diferentes, con temperaturas y comidas distintas.
Antes del viaje recuerda llevarte la cartilla de vacunación y/o pasaporte por si tienes que acudir a un veterinario, y este esté informado de la protección que ha recibido tu perro o gato. Si es un sitio nuevo, pregunta a tu veterinario por una clínica u hospital veterinario de su confianza en la zona dónde vas a pasar tus vacaciones.
Además, aprovecha, si tu perro o gato se marea en los viajes, consulta con tu veterinario por una medicación específica para el mareo y proporciónasela con antelación, ¡tendréis un viaje más feliz! .
Recuerda que deben viajar en la parte posterior del coche con un separador, bien en un transportín, o atado en el asiento de detrás con un cinturón de seguridad especial. ¡ Buen Viaje!
Una vez en el sitio elegido recuerda que los cambios de horarios, rutinas, comida y ambientes son más frecuentes las alteraciones gastrointestinales de tu mascota, intenta planificar las comidas y mantener la misma alimentación de siempre.
Ponle hielo en los bebedores. Los animales necesitan hidratación continua y cuando hace calor, mejor agua fresca. Existen fuentes o bebederos adaptados para los gatos, que permiten que el agua circule constantemente.
Protege frente a los parásitos de tu zona de veraneo, existen diferentes parásitos en diferentes zonas geográficas, en el norte de España son más frecuentes las pulgas y en el sur las garrapatas, pero además hay parásitos como la filaria (gusano del corazón) o la leishmaniasis que pueden existir en nuestro lugar de veraneo y no en nuestra zona de residencia habitual y frente a los que nuestros animales no estén convenientemente protegidos.
Revisa después de los paseos por el campo el pelaje y los oídos de tu mascota, pulgas, garrapatas y ácaros o espigas pueden esconderse en los sitios más insospechados de su cuerpo.
No pasees a tu perro en las horas centrales del día, el pavimento acumula el calor y puede quemar sus almohadillas, mejor pasear a primera hora del día o al anochecer. Pon l mano sobre el pavimento durante 5-8 segundos si te quema, a tu perro también.
No dejes nunca solo en el coche a tu perro o gato. Es fundamental que el lugar donde permanezca el animal esté aireado y a la sombra, y mejor que no esté atado, podría sufrir un golpe de calor, son más sensibles que nosotros a las altas temperaturas.
¡Que tengas un buen verano!